UN BUEN AMIGO...
Pues él es mi amigo y lo adoro mucho en mis planes no esta dejarlo nunca, me ha enseñado demasiadas cosas, cada momento con él es inolvidable y me gusta escribir sobre lo que pasa o paso con nosotros porque a pesar de todo eso que paso seguimos juntos.
Él me ha enseñado demasiadas cosas pero pues
también me siento confundida por lo que él piensa de si mismo, de las
decisiones que toma el para su “bienestar”. Que yo como amiga siempre lo he
apoyado en las buenas y en las malas, a pesar de que tuvimos por muy poco
tiempo una relación de novios que a la mejor no fue perfecta pero si me enseño
demasiadas cosas de él y de mi, los dos nos dimos cuenta que nuestra amistad
era más fuerte que una relación de novios a la mejor solo probamos de eso que
nosotros creíamos que era lo mejor para cada uno “intentar una relación”
dándonos amor pero sin darnos cuenta que el amor no lo estábamos dando día a
día sin la necesidad de tener ese sobrenombre que tanto nos importo alguna vez
“novios” después nos dimos que cuenta que no era lo correcto. De mi parte
cuando terminamos nuestro noviazgo me dolió mucho porque sabía que perdería de
nuevo una amistad la cual pensé que jamás la perdería de esa manera por hacer
las cosas de una manera tan rápido y sin pensarlas hasta después, a la mejor él
nunca noto lo triste que estaba por dentro porque he aprendido aparentar
algunas cosas para que esa gente no empiece a dar opiniones negativas sobre mí,
empezaron los pensamientos negativos y malos de mi parte yo lo vía muy bien por
eso opte por ya no meterme en su vida para que él siguiera con esa felicidad
que yo veía que lo abordaba día con día, mis amigas me hablaban y me decían que
también lo veían bien, que no tenía caso volverlo a buscar o algo similar. Como
pasaban los días pasaba el dolor pero no la angustia que tenía por dentro por
saber como estaba, trataba de estar al pendiente de él en todo lo que me fuera
necesario, trataba de que él me sintiera cerca. Llegó el día donde le empecé
hablar de nuevo pero a espaldas de todos al igual que a escindidas aunque nunca
fue nuestro agrado eso era necesario hacerlo para aunque sea saber como
estábamos y si necesitábamos algo, fue difícil regresar a la relación de amigos
que teníamos antes. Un día sin darme
cuenta mi mente decidió sacarlo de mi vida porque paso un suceso inesperado que
me dolió demasiado pero ya ni hablar de aquel día, después otra vez nos dejamos
de hablar pero ahora fue de mi parte por mis motivos, no sabía si hacia bien
pero pues era lo mejor con tal de verlo feliz. Ya se acercaba mi cumpleaños y
para ese día él me había prometido un perrito y pues días antes de que fuera mi
cumpleaños mi único pretexto para hablarle era diciéndole los días que faltaban
para aquel anhelado día por mi porque pensé que todo regresaría a ser como
antes… Y llego el día donde me felicitaron, me hicieron mi pastel pero jamás él
se acerco a mi ni para decirme “hola” o mínimo “felicidades” solo quería algo
así porque ni un msj me pudo mandar en ese día que él y yo ya lo habíamos
planeado desde hace mucho tiempo, en la tarde fue a mi casa a darme esa perrita
hermosa a la cual le puse FUFU y pues si me abrazo pero rápido y muy fuerte
porque a mí me acompañaba alguien más, quedé muy decepcionada de él ese día
pero yo ya no tenía porque decirle nada.
Pasaron días,
semanas hasta que tome el teléfono y logre marcarle a su casa para platicar un
poco con él, no se lo espero de mi pero pues si lo volví a buscar a pesar de lo
que había pasado, platicamos horas y horas hasta que me gano el sueño como lo
era antes, que el escuchaba y platicaba conmigo hasta que me quedara bien
dormida, prometimos que después de ese día todo iba a ser igual que antes y
pues hemos intentado poco a poco que así sea.